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Tercera
semana consecutiva que el Ultimate Fighting Championship nos regala evento. En
esta ocasión tendremos cartelera en el Rogers Arena en Vancouver y sin duda
existen dos pilares fundamentales de esta magna función que no se pueden perder.
1) La lotería de Carwin
Desde la
derrota ante Brock Lesnar, el “Maquinista” regresará al octágono por primera
vez en casi un año. Su rival era originalmente Jon Olav Einemo, pero Dana White
le regaló la oportunidad de regresar a la cima de los pesados al otorgarle el
sitio de Lesnar “Hombre hecho bestia” (problema de diverticulitis) para enfrentar a Junior Dos Santos.
Todos
sabemos de la explosividad de Carwin algo que vivió muy de cerca el propio
Brock Lesnar después de la incesante ráfaga de golpes que recibió en el primer round
de la pelea en el UFC 116 sin embargo el gran problema se vivió cuando terminó
vaciando el tanque, se agotó físicamente y el superior juego de piso del ex
campeón de los completos marcó la diferencia en el segundo round.
Se dice que
uno aprende mucho más de las derrotas que de las victorias y eso es exactamente
lo que sucedió con Carwin, quién se entrenó de una manera muy especial para
enfrentar este fin de semana a “Cigano”.
Mantuvo la dinamita en los puños que lo caracteriza, pero llevo al cabo
un régimen alimenticio y trabajos físicos específicos para bajar de peso con lo
cual afirma estar en la mejor forma de su carrera.
En caso de
quedarse con la victoria tendrá la oportunidad de buscar el título en otoño
ante el “Toro” mexicano Caín Velasquez. (Puede ser UFC 136 el 8 de Octubre en Houston, Texas).
2) La
transformación de Florian
Tuve la
oportunidad de entrenar seis meses con el equipo nacional mexicano de taekwondo,
una experiencia única y que me hizo ver de cerca el sacrificio de los atletas
de alto rendimiento para alcanzar sus metas entre las cuales varios compañeros
buscaron un boleto para los juegos olímpicos de Beijing en un peso que no era
el suyo. Imagínense competir en 80 kilogramos y tener que pelear en 68. Se necesita hacer literalmente una
metamorfosis para seguir siendo competitivo al más alto nivel a pesar de tener
que bajar de peso drásticamente algo que la mayoría no puede lograr.
Con esto en
mente yo sigo impresionado con los cambios físicos que ha tenido Kenny Florian
para combatir en esta cartelera del UFC.
Recordamos al peruano/estadounidense en la final del Ultimate Fighter I
ante Diego Sánchez peleando en peso medio (185 lbs / 84 kgs), posteriormente
buscó fortuna en la división de los ligeros y ahora 20 kilogramos
después lo veremos ante el brasileño Diego Nunes en peso pluma (145 lbs / 65.7
kgs).
No tengo
duda de que Ken-Flo tiene las herramientas para sobresalir bajo cualquier circunstancia
pues siendo especialista en Jiu Jitsu brasileño y Muay Thai además de poseer los
codos mas mortíferos del mundo de las artes marciales mixtas lo convierte en
favorito ante casi cualquier rival y Nunes no es la excepción.
En caso de
que Florian se adapte a su nuevo peso y gane este sábado muy seguramente Dana
White le otorgará su tercera pelea por el titulo ahora contra Jose Aldo.