El equipo
comandado por Shane Carwin sacó la primera ventaja de la
competencia con la victoria de Neil Magny (4ta selección de
Carwin) sobre Cameron Diffley (3era selección
de Nelson) por decisión unánime, asegurándose de
esta manera el control de los combates. Magny superó sin sobresaltos a un
Diffley timorato y unidimensional, que poco pudo hacer para contrarrestar el
striking preciso de su rival.
*The Ultimate Fighter: Team Carwin vs. Team Nelson, se puede ver los Viernes por el canal FX en los EUA a las 10 p.m. ET/PT, y en UFC.tv para Latinoamérica.
Diffley entró al
show con un curriculum extenso y una vasta experiencia como entrenador. Quizá
alguno lo recuerde por sus apariciones en la séptima temporada de TUF como
coach asesor de jiu-jitsu de Forrest Griffin. Diffley entrena
regularmente con los hermanos Nick y Nate Díaz en California, aunque por lo visto mucho no ha aprendido
mucho del exquisito boxeo de los hermanos más rudos de las Artes Marciales
Mixtas (MMA por sus siglas en inglés). Magny, por su parte, logró su ticket a
la casa de TUF luego de derrotar a Frank
Camacho
en un combate eliminatorio que se extendió hasta el round de muerte
súbita.
El episodio inició
con el arribo de los 16 competidores a la casa. Todos se mostraron sorprendidos
por las comodidades que ofrece la residencia, en especial, James Chaney, quien suele descansar en un colchón del garaje de un
amigo. Los primeros intercambios poco amistosos entre
Matt Secor y Julian Lane le dieron el
toque colorido a este segundo capítulo.
Las primeras
diferencias entre los entrenamientos de ambos equipos fueron notorias. Carwin y
su staff asesor compuesto por Trevor Wittman, Nate Marquardt y Pat Barry trabajaron en
aspectos técnicos. Roy Nelson prefirió un
entrenamiento menos intenso, con dos prácticas al día y algunos de sus pupilos
ya comenzaron a cuestionar la estrategia.
En la selección
del combate, Nelson escogió a Neil Magny del equipo contrario, para enfrentarse
a Cameron Diffley. El clásico duelo entre el striker (Magny) y el grappler
(Diffley) fue tomando forma.
La pelea no tuvo
equivalencias. Magny trabajó en la larga distancia, sacando provecho de su
ventaja en alcance de brazos. El jab fue la clave para mantener a su rival a
raya. Diffley, como era de prever, intentó ir por el derribo desde el inicio,
aunque el timing no lo acompañó. Finalmente, cuando logró llevar el combate al
suelo, no pudo capitalizar sus dos intentos de sumisión (llave de brazo y
palanca a la rodilla).
En el segundo
asalto, Magny siguió trabajando los cuádriceps de su rival con sus tibias,
controlando la acción y acertando los golpes más significativos.
Un tercer asalto
era una posibilidad, pero los jueces no lo vieron de esa forma. Sus tarjetas
dieron como ganador a Neil Magny por unanimidad. Dana White reconoció que
Nelson se equivocó en la selección de este combate. La semana próxima será el
turno de Carwin para seleccionar el próximo duelo.