La noche del 15 de noviembre, en la Ciudad de México, el mexicano Kelvin Gastelum intentará mantener su invicto en un difícil combate que le enfrenta a Jake Ellenberger, ante su gente, ante su pueblo, en esa cartelera que va a ser historia y en la que también está en juego la corona pesada del UFC.
Kelvin Gastelum (10-0) llegó a la escena de las MMA cuando ganó The Ultimate Fighter 17, venciendo en la final al favorito de todos, Uriah Hall, el 13 de abril del 2013. No solo eso, sino que había sido el último en ser seleccionado para competir en aquella edición y, al final, terminó coronándose campeón. Esa característica de no ser el favorito le ha acompañado desde el comienzo y él se ha encargado de ir eliminando dudas, poco a poco, rival tras rival. 
Ahora, nadie duda que este guerrero mexicano, nacido y criado en Estados Unidos, pueda llegar bien lejos, sobre todo si recordamos que uno de esos combates que ganó fue contra el veterano de mil batallas Rick Story, uno de los mejores en las 170 libras.
Su carta de presentación siempre ha sido su excelente lucha y gran manejo de la pelea en la lona. Pero a todo eso le ha agregado una potente mano izquierda que se ha encargado de dejar a más de uno tendido en el octágono.
Si cuando empezaba en este deporte pegaba duro, ahora que ha bajado de peso mediano a welter, esos puños se sienten aún más y son letales en las 170 libras, sin olvidar que en su última cita no pudo hacer el peso y le costó un porcentaje de su bolsa.
Este enfrentamiento en México es clave para su crecimiento. De vencer a Jake Ellenberger, Kelvin empezaría a tocar la puerta de los diez mejores en su división y nos demostraría, una vez más, que está para empeños mayores.
Su rival no se la va a poner fácil. Ellenberger (29-8) es un veterano que no hace mucho tiempo era uno de los contendientes en peso welter, pero que ha perdido tres de sus últimos cinco enfrentamientos y que sabe que para mantenerse importante tiene que salir triunfador el 15 de noviembre. Lo que Jake nos trae es muy similar a lo de Kelvin, aunque tal vez más desarrollado, pulido. Manos de hierro y excelente lucha.
Algo que ya sabemos es que ninguno de los dos rehúye el contacto ni la acción en la jaula y que, si bien es cierto que vienen de la lucha olímpica y se mueven como pez en el agua cuando van al piso, ambos siempre sueltan sus puños y buscan acabar antes de tiempo.
Si a esto le agregas el hecho que aquí nos encontramos al peleador experimentado tratando de mantenerse importante ante el joven que quiere subir en el ranking y establecer su nombre, estamos ante una pelea que nos promete mucho.
Este podría ser el momento definitivo para Gastelum, quien, sin duda alguna, va a ser el más apoyado de los dos esa noche. Las condiciones están dadas para eso, solo que hay, al menos, una persona que no lo cree; Jake Ellenberger.
Ahí nos vemos
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