Dennis Bermudez aparecerá en UFC 189 en búsqueda de regresar a la victoria ante Jeremy Stephens el 11 de julio de 2015 en el MGM Grand Garden Arena de Las Vegas, Nevada.
Parecía encarrilado hacia una pelea por el título de peso pluma cuando Dennis Bermudez (14-4) cayó en UFC 180. El estadounidense-puertorriqueño había encontrado un ritmo impresionante dentro del octágono, y se había montado una racha de siete victorias al hilo, posicionándose a un paso de poder retar al campeón por el cinturón. Apareció Ricardo Lamas en la Ciudad de México y de un calculado jab puso a Bermudez sobre la lona para continuar su ataque, encajando una apretada guillotina, finalizándolo poco después de los tres minutos. Bermudez decayó dentro del ranking de la división pero ahora aparecerá en una de las carteleras más anticipadas del año en UFC 189, con la oportunidad de reivindicarse ante el experimentado Jeremy Stephens y retomar ritmo.
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Curiosamente, antes de armarse de esa racha de siete victorias al hilo, Bermudez venía de una racha de tres derrotas consecutivas. El peleador de 28 años entró a The Ultimate Fighter 14 a pesar de venir de dos derrotas, y demostró ser una pieza clave de la temporada. Con tres victorias dentro del programa, Bermudez se había ganado su lugar en la final ante el agresivo brasileño, Diego Brandao. Bermudez salió dominante, tumbando a Brandao con un golpe y trabajando fuertes golpes a ras de lona, pero su entregó un brazo entre sus ataques y el brasileño logró encajar una barra de brazo que finalizó a Bermudez, y así, dándole su tercera derrota al hilo.
No obstante, el talento y entrega de Bermudez estaba más que demostrado. Su mentalidad la mantuvo en alga y rebotó con una serie impresionante de siete victorias que le valieron cuatro bonos de la noche, una por “Sumisión de la Noche”, otra por “Pelea de la Noche” ante Matt Grice, y dos “Actuaciones de la Noche” al finalizar a Jimy Hetes y Clay Guida. Su racha lo llevó al encuentro contra Lamas, en ese entonces el número dos de la división, y de vencerlo, era probable que se ganara su lugar ante Jose Aldo.
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A pesar de la dura caída, Bermudez no parece haber perdido su confianza e incluso levantó la mano para enfrentar a Conor McGregor cuando surgían las dudas sobre la salud de Jose Aldo a unas semanas de UFC 189. Para realmente ganarse su lugar de regreso, sin embargo, Bermudez tendrá que superar al experimentado Jeremy Stephens, quien tuvo su debut octagonal en UFC 71</strong> hace ocho años, y cuenta con más de 20 peleas en la promotora.
Stephens no ha tenido más consistentes dentro de la división, y ha perdido cinco de sus últimas ocho peleas, incluyendo sus últimas dos en decisiones ante Cub Swanson y Charles Oliveira. Sin embargo, Stephens tiene una amplia experiencia, entiende completamente la dimensión entera de lo que se requiere para mantenerse consistente entre los mejores peleadores del mundo, y ha enfrentado grandes estrellas, incluyendo al próximo retador del título de peso ligero, Donald Cerrone, al ex campeón de esa categoría, Anthony Pettis, y al actual campeón, Rafael dos Anjos, entre otros más. Su récord evidencian su paso como peso ligero, pero Stephens se ha mantenido como pluma en sus últimas cinco peleas, un cambio de categoría que le valió comenzar con tres victorias consecutivas.
Bermudez tiene un condecorado paso por la lucha universitaria y ha logrado desarrollar cada aspecto del MMA para convertirse en un peleador completo, pero Stephens viene de un camino parecido, y es un encuentro entre un peleador posiblemente más veloz – Bermudez – y otro posiblemente más potente – Stephens. En cuando estilo y habilidades, ambos son similares, y lucen cómodos de pie, en el cinch y en el piso.
¿Veremos a Bermudez terminar con una victoria que lo coloque de regreso entre los mejores cinco, o a Stephens demostrar que aún tiene mucho camino por recorrer en UFC?