Jiri Prochazka y Alex Pereira pelearán en la estelar de UFC 295 por el cinturón vacante de las 205 libras. Previo al combate del sábado 11 de Noviembre recordamos cómo ha sido su ruta hacia la cima.
Jiri Prochazka llegó a UFC con más de 30 peleas profesionales. El checo desarrolló la mayor parte de su carrera en su país y Japón con una gran reputación de noqueador. En su primer duelo en el octágono finalizó al ex retador Volkan Oezdemir en el segundo round, se llevó un bono por desempeño y encendió las alertas del peso semicompleto.
Pereira regresó a las MMA tras haber competido solo en kickboxing por tres años y consiguió un nocaut en LFA que le abrió la puerta a su debut en UFC.
Una rodilla voladora y poderosos puños le dieron a Pereira su primer triunfo y bono en UFC. Nueva York fue el escenario de su debut en el octágono y consolidó su calidad como un peligroso noqueador.
La siguiente víctima de Prochazka fue Dominick Reyes, quien resintió el poder del checo y en el segundo round cayó tras recibir un codazo giratorio. Esa noche, Jiri se anotó el bono de desempeño y de ‘Pelea de la Noche’. Tras el triunfo se convirtió en el retador por el cinturón de las 205 libras.
Con uno de los ascensos más rápidos, Prochazka mostró su talento y tras una dura batalla -por muchos considerada como la mejor del año- sometió a Glover Teixeira en Singapur y se convirtió en el campeón de peso semicompleto. Sin embargo, una lesión lo alejó de la actividad, razón por la que el checo decidió dejar vacante el título.
Este año fue inmejorable para el brasileño, pues tras anotarse un par de triunfos sobre Bruno Silva y Sean Strickland obtuvo la oportunidad de medirse a Israel Adesanya por el cinturón de las 185 libras, un rival que conocía bien, pues en kickboxing se habían enfrentado en dos ocasiones.
Otra vez en Nueva York, Pereira tuvo una actuación ejemplar y con un TKO en el último round se coronó nuevo monarca de peso medio.
Pereira tras haber perdido el título de las 185 libras en la revancha con Adesanya subió a las 205 libras y tuvo un debut exitoso con un triunfo por decisión sobre Jan Blachowicz en UFC 291. Con esta victoria ganó su pase hacia la oportunidad de disputar la corona de los semicompletos en un escenario que le ha venido muy bien: Nueva York.
En UFC 295, Prochazka buscará coronarse nuevamente como campeón semicompleto y quedarse con el cinturón vacante que dejó Jamahal Hill tras sufrir una lesión que le ha impedido regresar a la actividad.