El último peso gallo del Team Velásquez tiene enfrente su pelea para seguir poniendo en alto al Team Velasquez, pero antes habla con nosotros sobre su personalidad.
“Soy muy sentimental a la hora de pelear. Mezclo las emociones y la adrenalina con lo que pasa dentro de la jaula.”
El sueño original era ser boxeador. Dejó la escuela para seguir sus ideales. Sus abuelos son la más grande motivación. Para “Psycho”, todas las personas deben tener una dosis de locura para poder vivir.
Antes de llegar a las MMA (Artes Marciales Mixtas por sus siglas en inglés), Marco estudiaba Educación Física y, después, Ciencias de la Educación. Sin embargo, eso nunca lo llenó por completo. Comenzó a entrenar boxeo porque lo traía en el corazón. “Mi tío abuelo era boxeador y eso pasa a las demás generaciones. Crecí siendo aficionado y la misma sangre te lleva al deporte”.
Su ídolo era Julio César Chávez. Conforme pasó el tiempo, “Psycho” se dio cuenta que en Morelia no había muchos lugares para practicar el pugilismo. “No había apoyo del gobierno y entrenábamos al aire libre. No iba a trascender en el boxeo, fue entonces que conocí las MMA, me enamoré y ya no me detuve”.
Su empuje y determinación eran tan grandes que a solo tres meses de haber comenzado a entrenar artes marciales mixtas, debutó como profesional. “Estaba tan caliente por pelear que me aventé sin pensarlo”. Su mamá no quería que fuera peleador de tiempo completo, pero eso no detuvo a Beltrán, pues terminó haciendo lo que él quería. “No me importó nada y dejé todo atrás”.
Confiesa ser muy sentimental. “Creo que es muy importante involucrar las emociones porque es cuando le pones corazón. Es lo que te hace no abandonar el combate, soportar el castigo y no rendirte.” Antes de entrar a la jaula, “Psycho” recuerda a dos personas que marcaron su vida: sus abuelos. “ Me frustra que no estén conmigo físicamente. Me gustaría que estuvieran presentes en esos momentos”.
Marco prefiere que las personas cercanas a él no lo acompañen a sus peleas. “Es un momento de soledad que disfruto. Las cosas que traigo en el corazón las puedo liberar y sacó los sentimientos reprimidos.” Es un momento de reflexión y de satisfacción. Por eso para “Psycho” lo mejor del mundo es pelear. Puede ser él mismo y no preocuparse por lo que pasa a su alrededor.
Es enamoradizo. Se define como fanático de las mujeres; sin embargo, fue una chica alemana la que le robó el corazón. “Es complicado porque no la veo mucho por la distancia. La conocí en México, me animé y le llegué”.
A sus 28 años está muy cerca de alcanzar la meta y pelear en UFC. “Cuando me hablaron para TUF: Latinoamérica estuvo bien chingón. No quería ilusionarme en exceso”. Previo a viajar al reality, Marco se lastimó el tobillo derecho durante un sparring, pero eso no fue un impedimento. “Me frustré porque no quería irme mal”.
“Psycho” es un ciudadano del mundo. Aventurero. Vive el día a día. No se preocupa por lo que pueda pasar en el futuro. Es el más sentimental del Team Velásquez y está listo para dar un paso más hacia la meta. “Es de las mejores experiencias que podré vivir”.