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Team Werdum: El Doctor Bentley "Bolivia" Syler

Bentley Syler es un doctor quien decidió dejar la medicina a un lado por unos años, para aprovechar el tiempo para convertirse en peleador de UFC. Conozcan a este guerrero del Team Werdum.

“Sería un regalo para mi padre”

Bentley Syler será el encargado de alzar la bandera de Bolivia en The Ultimate Fighter Latinoamérica. Emocionado, confesó que su progenitor, una semana antes de morir, lo vio en acción y le dijo que iba a llegar al UFC. Además, contó cómo lo ayuda haberse recibido de médico para su carrera de peleador.

“Esas palabras me quedaron marcadas de por vida”, recuerda Bentley Syler. Y, cuando cuenta el detalle de la historia, uno puede sentir la emoción que se despierta en él. “Tenía que pelear en Bolivia contra el campeón nacional. Mi padre, que nunca me había visto en combate, viajó desde Estados Unidos para estar presente. Él tenía un enfisema pulmonar y yo estaba preocupado por su delicado estado de salud. Gané por nocaut en el primer round y me preguntó si quería llegar al UFC. Le dije que era un sueño muy lejano, pero me contestó que en algún momento lo iba a lograr. A la semana falleció”, relató el nacido en Bolivia.

“Llegar al UFC sería un regalo para mi padre”, sueña Bentley, quien a los 31 años dio un paso enorme para sanar esa cuenta pendiente al ganarse la entrada a la casa de The Ultimate Fighter Latinoamérica: “En Estados Unidos tomé peleas profesionales y las gané todas. Se dio el momento del TUF, metí mi aplicación y fui uno de los elegidos. Mi objetivo principal por el que yo peleo es para darle inspiración a la gente boliviana. Siempre llevo la bandera en todo momento”, tiró.

Syler asegura que desde los ocho años empezó a entrenar kick boxing pero que recién a los 22 comenzó a competir, aunque solamente en boxeo. Después, llegó el turno de las artes marciales mixtas: “Arrancaron mis hermanos a seguir el UFC y ahí me metí a entrenar lucha olímpica, sambo y jiu jitsu. Veía que el profesor me ganaba cuando hacíamos sparring y decidí entrar del todo y aprender. Hasta viajaba a Brasil para traer técnicas nuevas”.

De todas formas, la vida de Bentley no pasa únicamente por los combates. Se confiesa fanático de la química, y exhibe con orgullo el título más importante de su vida: el de médico. “Siempre fui amante de la biología y la ciencia. Estudié genética y bioquímica un año en Estados Unidos pero no me pude adaptar y me volví a Bolivia. Acá lo más parecido era medicina y me terminé recibiendo en 2011”, aseguró.

La medicina fue clave no sólo para tener una salida laboral cuando finalice su carrera como peleador, sino también para ayudarlo en cada entrenamiento: “Me sirve porque tengo conocimiento del funcionamiento del cuerpo humano. Me interesa la fisiología del deportista, que es distinta a la del cuerpo común. Yo me comparo con el mecánico de los autos de carrera. Con mis lesiones puedo saber cuál será el tiempo de recuperación y las acciones que tengo que llevar a cabo”.

Podés seguirme en Twitter @fedenogueira25