Álvaro y Vernon han vivido muchos momentos juntos en los últimos meses, pero ahora tendrán que enfrentarse en Monterrey
Efrain Escudero hizo que Alvaro Herrera y Vernon Ramos fueran compañeros en la segunda temporada de The Ultimate Fighter Latinoamerica, en ese momento nadie hubiera imaginado que se enfrentarían este sábado en Monterrey, como parte de la primera función que trae UFC a la capital de Nuevo León.
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Mientras estuvieron en la casa, ambos desarrollaron una buena amistad que trascendió más allá de la casa del reality más famoso de las artes marciales.
Ambos estuvieron entrenando en el MMA Lab en Phoenix, Arizona, junto al coach Effy, Ramos preparando y Álvaro buscando crecer como artemarcialista, sin embargo, el destino les tenía preparado algo diferente; ambos recibieron el llamado para pelear.
Esto hizo que pasaran de ser amigos a rivales e incluso tuvieron que cambiar de campamentos, porque era complejo que los dos estuvieran preparándose para pelear entre sí en el mismo lugar.
Ramos se quedó con Escudero y Herrera emigró rumbo a Albuquerque, para entrenarse en el prestigiado gimnasio de JacksonWink MMA, donde se han preparado muchos peleadores como Jon Jones y la recién coronada campeona gallo de UFC, Holly Holm.
Sin duda la oportunidad para Herrera es enorme, pues durante TUF Latinoamérica solo tuvo oportunidad de mostrarse en una pelea que perdió en dos rounds, por lo que será momento de que ponga en práctica todo lo aprendido en Nuevo México.
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De hecho, él escogió ir para allá pues lo conocen a la perfección ya que estuvo en el primer programa de desarrollo de UFC para Latinoamérica, incluso le guarda un especial cariño a esta ciudad donde vivió mucho tiempo, hizo bastantes amistades y consiguió trabajos de todo tipo, como jardinero, en una barbería y hasta dando clases.
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Para Vernon el momento de subir al octágono le deja un sabor agridulce, pues por una parte está cumpliendo su sueño de formar parte de UFC y ser un guerrero en toda la extensión de la palabra, pero por el otro sigue viviendo con la incertidumbre de no saber qué le ocurrió a su padre, quien continúa desparecido.
La batalla no será sencilla, Vernon es un tipo aguerrido que le gusta ir siempre al frente, mientas que Álvaro gusta del boxeo, de encontrar la distancia adecuada para conectar golpes eficientes que le ayuden a minar la resistencia de su oponente, por ello es que el boxeo es una de sus principales armas.
Los dos se conocen demasiado, tanto que parte de la estrategia estará en encontrar quién sorprende mejor a su rival este sábado cuando suene la campana para que arranque la pelea. Monterrey puede ser el lugar en el que se catapulten a las grandes ligas estos peleadores, siempre y cuando ofrezcan un buen espectáculo.